La cruzada de dos días sin agua corriente

No somos nadie. Lo peor que le puede pasar al ser humano es que su novio le abandone por otro y que en tu calle haya una avería (del Copón) en una de las tuberías. ¿Cómo es un día en Occidente, en Madrid, sin agua corriente? Ni caliente, ni fría, amiguis. Solamente SIN AGUA. 

Al principio resistes, luego te ríes y luego quieres bajar a meterle metralla por el culo al Canal de Isabel II. 


Si piensas que puedes tener un mal día por levantarte con el pijama de cuadros, no te digo nada si te levantas, haces pis y no puedes tirar de la cisterna.¡¡¡NO HAY AGUA!!! No puedes hacer café, no puedes lavarte la cara, ni nada... DE NADA. Ya me entendéis. Y para más INRI tienes que ir andando al trabajo porque tu abono de metro ha caducado y tienes la boca como un gatete. 

Es el primer día, aun no hueles mal. 

Pasas todo el día ganándote el pan, soñando con el momento en el que llegarás a casa y te meterás bajo la ducha imitando a la de Herbal Essences. ¡¡Ay ilusa!! Que no han arreglado la avería. Con la gota de Shin Chan en tu puta cara, te vas a Mercadona y compras garrafas de agua mineral, como la que pide Mariah Carey para bañarse con su perro. En este caso este perro vive mejor que yo.

De momento amigos, así están las cosas. Mañana puede que mi pelo parezca que tiene grasa para hacer 50 paellas y churros para toda la oficina. Repu La Cerda a mi lado sería como Grace Kelly, aunque algo más manchega. 

Cuando llegue, amigos de mi trabajo que le leéis, no me juzguéis, la vida está siendo dura conmigo... e Isabel II también. ¿Alguien me deja ducharme en su casa? Es en serio, como esto siga seré como Tom Hanks en Naufrago...



0 comentarios:

Publicar un comentario

 

TWITTER

FACEBOOK