Por si lo lees...

Se busca...  Cada persona busca un camino, pero en esos pasos andados podemos encontrarnos con unos pasos casuales que, de repente, se posan a la altura de los tuyos. Van al compás, como una instrucción militar. Andáis durante un tiempo, bailáis poco, porque os empeñáis en decir que no sois de baile, sino de barra. Pero resulta que el son de Caco Senante, después de mucho tiempo, une los mismos pasos por una noche, una sola noche que acaba en un jardín de Príncipe de Vergara. Y ahí se quedan los pasos, como un camino en el que puedes ver las huellas por unas horas, después acaban difuminadas hasta que desaparecen. 

Robert Redford y Jane Fonda, en "Descalzos por el parque" 1967

Por si lo lees... Se busca... El olor. Cada uno de los olores que se desprenden de esos pasos que un día acompañaban a los tuyos con buen ritmo. Las palabras que no estaban vacías. Las notas en el mantel que te informaban de la sorpresa que había en el horno. Se busca  lo clásico con "Siete novias para siete hermanos" de Stanley Donen. Lo emocional de una buena noticia, ausente en estos tiempos. Lo emocionante de un partido del Real Madrid, porque tiene que ser del Madrid. La tristeza por la pérdida de una liga. Los gritos de una Copa del Mundo. Las margaritas de un jarrón. La protección. El "llevo razón, como siempre". Los conciertos a los que odias acompañarme. La planificación anticipadísima que tanto detesto. Los pellizcos en la nariz. El "mírame la barba ¿Me la he dejado igual?". El "no veo, pasame las gafas". El no quiero que te cortes el pelo. El sushi que no te gusta. La salsa misteriosa del cocido madrileño. Las críticas hacia los mal vestidos. Las risas con la televisión. El beso de despedida mientras duermo, con el olor a champú y perfume. Una mano que busca la otra mientras conduces. Las copas de vino frías junto a una cerveza más fría aun. Las encimeras de la cocina como asiento, acompañadas de una paella. El "haz tú esto, que se te da bien". Ver cocinar. El te crees muy mayor, pero en realidad eres muy pequeña. El olor a café que no puedes tomar. El tintineo de los hielos de un vaso de tubo, por supuesto. El mirar la hora por si llego tarde. El mensaje en el móvil cada día. El suerte, todo saldrá bien, como siempre. 

Ya veis que entre tarantos, tardes de toros, coplas y tangos... las folclóricas también tenemos tiempo para los "Se busca...".