Si hablo de los Goyas 2014 ¿Puedo decir que fueron una mierdecilla?

Calificar la gala de los premios Goya de este año 2014 es fácil y complicado a la vez, lo primero porque fue mala y aburrida; y la segunda porque es tan tan mala que no hay casi ninguna palabra que abarque tanto sopor. Pero para eso están los expertos en Tv como @AlfredoLZamora y @BorjaTeran que lo explican todo divinamente. Intentaré ser breve, como los señores que recogían premios, espero cumplirlo. 

 

Macarena Gómez, aprobada. Su marido, un mamarracho al que dan ganas de cazar con una red de acero. Mucho Mónaco y vienen a estos premios vestidos de trasvestis trasnochaos y con polvo de 30 sacos de patatas. Una vergüenza de sus hijos.

Belén Rueda. Madre, abuela y bisabuela como Mike Jagger. Plumeti en el vestido de Caprile, que faltó vestir a los azafatos de Adecco, no se presentaría al concurso que daba 5.000 euros para ello. El moño italiano NO NO NO.

Dafne Fernández iba mona, aunque parecía un tiro de cocaína, espero que hayáis escuchado aquello de: "Es tan larga que la vistes de rojo y parece un arañazo". Pues lo mismo. ¿Participó en el número de baile donde no escuchaba nada? Sí ¿No?

Esta chica, Michelle Jenner parece tan aja, que no me atrevo a decir que lleva un pavo muerto en las piernas. Que es guapa, sí, pero lo que más puntos le da es que se hace selfies con Hugo Silva. Sí, amigas y amigos que estáis al otro lado. Llegó con Silva y posé con él.

Carolina Bang, la esposa de Álex de la Iglesia vestida de verde, también de Caprile. Lo siento, le damos un no. Ese verde le hace verdear el pelo, como cuando una es rubia de niña y se mete en una piscina de cloro. Peces, a los ríos, a las galas cosas en condiciones.

José Coronado está porque quiero yo en esta lista. Y punto. Me besó amigablemente cuando todo el mundo en el photocall me miraba con cara de "¿Qué le pasa a esta chalada en la cara?" Tenía un flemón. José Co-ro-na-do. TE QUEREMOS.

Es una maravilla, ella, tan dulce y el vestido, tan especial. Aunque con el interior de una cinta de VHS "Arrebuñá" en la cadera. Como dice Ari Bradshaw "Ojalá Silvia diciendo hasta el toto de que me preguntéis como me encuentro".

Marisa Paredes ha visto al lobo, a una manada, a una jauría de leones hambrientos y ha luchado con ellos, como la abuela de Madagascar.  Luego ha ido a en descapotable hasta el hotel y cuando ha llegado, se ha echado sin piedad laca y purpurina. Y al entrar ha visto a Pilar Bardem.

Aun le falta pero, puede que sea con algunos años más la nueva María Dolores Pradera. Elegante, delgada y siempre vestida igual pero tan elegante como siempre. Eso sí Ana Belén, come algo.

Hola Nieves ¿Cómo llevamos eso de comer algo al día? Una nuez o algo. Aunque sea el grano de pipa Tijuana. El vestido es maravilloso pero posar en las revistas de moda no alimentan el cuerpo, aunque sí la cartera. Vamos, Nieves. 

A la derecha, la culpable de los pelos de Marisa. Toda la familia de los Bardem, Carlos estaba nominado pero no se llevó nada. ¿Cómo pretendía que colara? Como le espetó el juez Castro a la Infanta. Si me leen, que no creo, como les va a molestar que en un mismo párrafo les nombre a ellos y la Familia Real. Pues ¡Toma! Rey Juan Carlos, Príncipes de Asturias, Doña Sofía... Infanta Elena. Javier Bardem dio el premio a Terele Pávez, lo único interesante que hizo.

Manuela, querida, tan guapa y horrible a la vez. MAM ¡Haz algo por ella! O tu madre o la Virgen de los Remedios. Teniendo acceso a mil vestidos ¿Seleccionas este alma de cántaro? ¿Te lo eligió Mónica Cruz?

Aquí la tenéis, a La Faraona. Nunca antes ha tenido un aire a su abuela, a la gran Lola... Hasta esta gala con ese peinado tan triste, elegantón en las folclóricas antiguas.

Guapa, muy guapa. Seca, más que un abrojo de Castilla La Mancha. Un secarral la pobre. Le hicieron la entrevista y ¡Oh! Que aburrida, Señor. Vulgaridad, chonivestido, chonicollar, chonicoleta. 

Leticia Dolera, que hace tantas películas como NINGUNA, iba estupenda. Muy en su línea que parece que la van a bautizar pero el vestido me lo pido, que yo tengo más pechazos, verás tú.